Alberto Barajas: Las matemáticas
Las matemáticas son más profundas, más importantes culturalmente, existencialmente, de lo que creía de muchacho; pero no todos los matemáticos participan de esa preciosidad.
Las matemáticas son más profundas, más importantes culturalmente, existencialmente, de lo que creía de muchacho; pero no todos los matemáticos participan de esa preciosidad.
Como usted sabe, la palabra mártir quiere decir testigo. Se llamó así a los primeros cristianos porque daban testimonio de que un hombre, en efecto, había sufrido una muerte cruel para salvar a los hombres. Soy, pues, el mártir de las matemáticas.
La Universidad es prodigiosa. Al entrar a la Preparatoria nos desorienta la riqueza de las posibilidades humanas. En nuestra mano está ser jurista, escritor, político, ingeniero o banquero. Pero unas voces misteriosas, que me hablaban en los corredores de la Escuela, me fueron guiando con gran sabiduría y firmeza. Me revelaron que yo no era novelista, ni abogado, ni historiador, ni hombre de negocios. Yo era matemático.
Les recuerdo que matemático no es el nombre de un talento sino de una pasión.
Alberto Barajas (1913-2004)
En 1989, durante un homenaje a su trayectoria, el doctor Alberto Barajas dirige a los asistentes estas memorables palabras: "La Felicidad es inversamente proporcional a la distancia que hay entre lo que soy y lo que quiero ser. Soy matemático, toda mi vida quise ser matemático, por lo tanto: soy inmensamente feliz".
"Sólo hay un área de la curiosidad humana en que se tocan verdades absolutas. Los matemáticos conocemos esta felicidad".
Alberto Barajas Celis